La discrecionalidad del trader

Esta semana he tomado una decisión de esas que no suelo tomar, He entrado largo en el mercado sin que se produjera una señal válida en el sistema y más de uno se ha sorprendido mucho en el foro por mi decisión. Suelo ajustarme como un reloj a las señales y esta vez me he saltado a la torera el sistema, en apariencia.

Por ello, voy a intentar explicar la situación que me ha llevado a tomar una decisión que en el primer día de mercado me ha llevado ya a que me saltaran dos stops, ahí es nada. El tiempo dirá si mi impresión era buena o no, pero de momento no tiene muy buena pinta.

Empecemos por el principio y eso es que tuvimos una señal el 18 de diciembre:

Una señal realmente retrasada que nos dejaba el nivel del stop en unos lugares realmente imposibles para nuestra operativa. Por una vez, y pasa de vez en cuando en nuestro sistema, nos teníamos que conformar con ver los toros desde la barrera mordiéndonos las uñas. No se ve en el gráfico, pero era una señal magnífica porque se producía tras un apoyo claro en la media ponderada de 150 sesiones. Y nosotros mirando…

¿Qué hacer? Sin duda, esperar. Ninguno de los valores que realmente queríamos para una entrada estaban en lugares que nos permitieran la entrada. Riesgos del 8 o el 10% no son asumibles para nuestra operativa y para rebajar el riesgo no vamos a rebajar la calidad teórica de los valores a elegir para la entrada.

Y ya hemos llegado a la palabra crucial: calidad. Aquí es donde termina el sistema y donde empieza la discrecionalidad del trader. Cada trader tiene su análisis y cada cual considera que un valor tiene calidad o no en función de sus propios criterios. A mí me gustan mucho las figuras, me apoyo en mis indicadores (que para eso los desarrollo) y, al final, lo que diga el ‘ojo humano’ es lo que va a ir a misa. Por tanto, la posibilidad de error es enorme. Elijo cinco valores europeos y otros cinco americanos cada vez entre una base de datos de más de 10.000 valores.

Por tanto, queda asumido que el sistema de inversión que seguimos en realidad lo que nos dice es aquello de «ahora sería un buen momento para entrar en el mercado si es que sabes elegir los valores que más van a subir». En eso estamos y a veces damos con joyitas, pero otras veces salimos trasquilados. En los últimos tiempos, la especialidad de la casa es que nos vuelen el stop y luego salgan disparados mientras nosotros ponemos cara de idiotas. Es el mercado y hay que aceptarlo así, pero estoy pensando seriamente virar hacia índices y  fondos sectoriales, que no van a subir nunca un 50% pero que no nos darán estos disgustos…

Una vez establecido que el sistema tiene una gran carga discrecional, vamos con la entrada discrecional de esta semana y para ello voy a poner un gráfico que no es precisamente de esta semana:

Este es el gráfico que me he pasado mirando toda la semana antes de decidirme y lo comparto ahora con vosotros. Corresponde a finales de 2012 y muestra una situación que se parece a la que tenemos ahora como una gota de agua a otra. En aquella ocasión se produjeron no una sino dos señales de entrada de Segunda División consecutivas y ambas se produjeron demasiado tarde, tardísimo.

A continuación se produjo un gran retroceso sobre la media ponderada de 150 periodos y no hubo señal de Market Timing. A pesar de que el Oscilador McClellan cruzó el cero al alza, no se produjeron el resto de circunstancias que nos permiten decir que la entrada puede ser rentable. En el Indicador inferior, que nos alerta de las señales de entrada y de ajustes de stops del Joserain Peak Alert, se ve que no hay una señal que cumpla las condiciones establecidas.

¿Por qué no hay señal? Sencillamente porque hay que establecer una serie de filtros para que no todos los cruces al alza del Oscilador por cero se conviertan en señal. Con estos filtros lo que queremos evitar a toda costa es que se conviertan en señales de entrada cruces como los que podemos ver marcados con elipses a la derecha del gráfico. Son correcciones que quedan «en el aire» y muy peligrosas tras una subida prolongada. De estas hay muchas y la mayoría ruinosas, por lo que establecimos filtros para eliminarlas.

Pero hay un efecto colateral del uso de filtros y ese es que en retrocesos aparentemente perfectos sobre la media en los que el mercado vuelve a salir al alza disparado tampoco marca la entrada. No hace más que su función, que conste. No es un error del sistema, sino un efecto colateral del uso de filtros.

Y aquí volvemos al ‘ojo humano’ y mi ‘ojo humano’, el mío y nada más que el mío, ven un lugar de entrada susceptible de ser aprovechado y entra como un miura. ¿Solo por el ojo humano? En realidad no. No soy tan brillante (o tan burro) como para que solo con mirar un gráfico pueda tomar decisiones. Miro muchos gráficos, analizo mucho. Tardo horas en tomar decisiones y de eso pueden dar buena cuenta los foreros, que encuentran mensajes míos a la uno o las dos de la madrugada.

Y esta vez miré. entre otros muchos, estos dos gráficos:

Son gráficos de amplitud, con el Oscilador McClellan Ratio Adjusted y el ADX especial que utilizamos calculado sobre la Línea A-D y que nos sirve para ver si el mercado está o no en tendencia. Corresponden al mercado alemán, el total, y al mercado español, con la variedad de que en el mercado español estudié dos osciladores, el del mercado total y el que correspondería solo al Ibex. Están presentados los dos en el gráfico del Ibex, el inferior es el que corresponde solo al selectivo.

Empecemos por el del mercado, que tiene su aquél, y lo primero que hay que aclarar es que las líneas naranjas y azules están trazadas con posterioridad al análisis que propició la entrada. ¿Qué vemos en estos indicadores? Lo primero, como queda encuadrado en el rectángulo azul del ADX, un mercado sin tendencia.

Cuando la línea negra del ADX va hacia abajo no nos está diciendo que la tendencia es bajista, sino que la tendencia, la que sea, no tiene fuerza. Y no parece que haya ninguna fuerza. Por tanto, las caídas que se están produciendo, incluso abultadas, no están marcando tendencia, de momento, lo que nos parece una buena noticia. Atendiendo a las velas y a los precios, la caída parece de las muy fuertes, pero en cambio, con el ADX de amplitud nos encontramos que no supone tendencia, de lo que concluyo (acertadamente o no) que se puede entrar al alza.

En los osciladores representados en el gráfico del Ibex lo que encuentro el jueves es un Oscilador McClellan del mercado completo justo a punto de cruzar el nivel cero, en tanto que el del Ibex está más alejado. El Ibex está más débil que el conjunto del mercado español.

Para colmo, el viernes se produce una caída del selectivo (cantada desde el jueves por la ampliación de capital del Santander) que produce una divergencia notable en el Oscilador McClellan. El jueves no existía este divergencia por cuanto los mínimos del Ibex eran aún ascendentes. A falta de ver como evolucione la situación, si desde el lunes el selectivo recuperara terreno tendríamos dos divergencias una de cortísimo plazo marcada en naranja y otra de corto plazo marcada en azul y mi entrada en valores españoles no sería tan locura como puede verse ahora mismo.

En cuanto al mercado alemán, el cruce del Oscilador McClellan por cero el jueves es claro y a pesar del bajonazo del viernes, sigue en positivo. Tan débil no está y este es el mercado que ‘manda’ en la Europa del euro, si es que puede hablarse con propiedad de ‘mando’ en el descontrol en el que se ha convertido el mercado europeo como consecuencia de la deriva del BCE.

Yo opté por la entrada aplicando la célebre discrecionalidad del trader y el coste hasta ahora ha sido aparentemente fuerte. Dos stops ha saltado por los aires. En cambio, uno de los valores americanos ha salido disparado. A ver si hay suerte y hemos dado con una de esas ‘joyitas’ que suben y suben…

 

NOTA DEL AUTOR. Todo lo expuesto en este artículo es fruto de mi análisis, que es el resultado de años de formación y trabajo. Lo comparto exclusivamente con fines didácticos y no representa en absoluto una invitación a realizar operación alguna en el mercado, ni con acciones ni con ningún otro instrumento financiero. Si quieres profundizar en el estudio de los indicadores de amplitud, tanto en nuestro libro como en nuestro foro encontrarás las herramientas necesarias para hacerlo. Si necesitas una primera aproximación, nuestra Guía Rápida del Sistema puede servirte como aproximación a lo que hacemos.