Las «pequeñas» diferencias entre el Dax y el Ibex

Las «pequeñas» diferencias entre el Dax y el Ibex

Durante toda la corrección, el gran problema de Alemania era China, cuya crisis ponía en dificultades a las grandes empresas exportadoras germanas. Luego fue Volkswagen con su fraude al descubierto y sin capacidad de reacción, que hundía sin remisión al sector automovilístico en Bolsa. Por supuesto, los índices europeos se vieron arrastrados por la corriente, sin capacidad de reacción alguna. Que ya se sabe que cuando Alemania va para abajo, los demás no hacemos otra cosa.

Ahora que parece que llega la hora de la recuperación, ni lo de China parece resuelto ni hay sensación de que por arte de magia la demanda china vaya a repuntar. Y, por supuesto, lo de Volkswagen sigue coleando y aún es incuantificable lo que le va a costar al grupo la trampa en sus motores. Pero la Bolsa sube y con el Dax a la cabeza. Una vez más queda de manifiesto que las excusas son eso, excusas que quedan muy bien cuando se trata de justificar el comportamiento del mercado. Si esos factores tuvieran de verdad tanto peso, las Bolsas seguirían cayendo a plomo. Tampoco se ha arreglado lo del precio del petróleo que tanto aprecía afectar a Wall Street…

Para mí es mucho más cierto que el mercado estaba literalmente agotado, que no podía más en su tremenda explosión alcista y que necesitaba hacer una corrección de alguna consideración para tomar aire. En realidad, desde 2011 no habíamos asistido a ninguna corrección realmente seria. Así, los indicadores de amplitud nos alertaron de la formación de un techo y de la posibilidad de una caída considerable, incluso de un cambio de tendencia que finalmente parece que no se va a producir. El mercado cayó a plomo y comenzaron las excusas donde en realidad sólo había sobrecompra.

Pero pocas de esas excusas hablaban de la debilidad intríseca del mercado español. Puntualmente se ha aludido a algún factor particular del mercado español, como la macroampliación del Santander, y en los últimos tiempos gana fuerza el «miedo escénico» a la «incertidumbre política» que se abre con las elecciones generales de diciembre y el complicado panorama político que reflejan las encuestas para los dos partidos que hasta ahora se han repartido poder y prebendas.

¿Está más débil el Ibex que el Dax? Esa es la pregunta que he hecho a estos gráficos:

Dax, oscilador McClellan, Línea AD y return point del mercado alemán Ibex, oscilador McClellan, Línea AD y return point del mercado español

Empecemos por el precio. El Dax, en el gráfico superior, corrigió un 24,42% desde los máximos de abril hasta los mínimos de septiembre, en tanto que el Ibex bajó un 21,90% entre su máximo de abril y el mínimo que marcó en septiembre. Corrigió menos el índice español pero la sensación a primera vista de ese mínimo de septiembre es muy distinta en los dos índices. Uno luchaba por salir al alza, el Dax, y otro se aferraba como podía a lo poco que encontraba, perdiendo con claridad el mínimo anterior, el de agosto.

Y desde ahí comienza la subida. Si alguien cree que al Dax le ha ido mejor en este periodo que al Ibex acierta solo en parte. Ha subido más desde mínimos pero se encuentra aún más lejos que el índice español de los máximos de abril. Exactamente, al Ibex le faltaba al cierre de ayer un 11,96% para llegar a esa cota y al Dax un 12,80%.

En cambio, vemos al Ibex atascado en la confluencia con la media ponderada de 150 periodos, presentada en color verde, en tanto que el Dax ha logrado superarla con claridad. Y aunque ninguno de los dos índices ha superado la directriz bajista trazada en color rosa, creo que si tuviéramos que apostar por cuál de los dos lo conseguirá antes (si es que se consigue este hito), la gran mayoría apostaria por el alemán. La sensación de fortaleza ofrecida por el Dax tanto en el primer rebote tras los mínimos como en el estirón de la semana pasada contrasta poderosamente con la sensación de agotamiento mostrada por el Ibex.

¿Es cierta esta sensación? Viendo los indicadores de amplitud representados, como siempre correspondientes a todo el mercado y no a los índices, no admite discusión.

  • En el Oscilador McClellan del mercado alemán marca claramente máximos ascendentes mientras que el del mercado español refleja máximos descendentes.
  • En la Línea de Avance / Descenso (Línea AD), vemos al mercado claramente por encima de la directriz bajista y de la media de 150 sesiones, pero el español está atascado en la directriz y sin sobrepasar la media.
  • En Return Point se ve diáfanamente cómo el mercado alemán muestra fuerza en las alzas, con el indicador apuntando al norte y con los colores en el orden del semáforo. ¿Y el mercado español? Pues algo ha mejorado pero está mucho más plano que el alemán y con los colores aún en el orden inverso al del semáforo.

Son las «pequeñas diferencias» que nos hablan de la actitud, de la fuerza y de la confianza de uno y otro mercado. Y eso que para el cálculo alemán se manejan más de 700 valores y para el español apenas 150. O será precisamente por eso… Ni China, ni Volkswagen, ni petróleo, ni zarandajas varias. Es actitud, es confianza. Es de eso de lo que está hecho el mercado.

¡¡Buen trading!!

NOTA DEL AUTOR. Todo lo expuesto en este artículo es fruto de mi análisis, que es el resultado de años de formación y trabajo. Si te ha gustado, me haces un gran favor si lo compartes en las redes sociales. Mis análisis los publico exclusivamente con fines didácticos y no representan en absoluto una invitación a realizar operación alguna en el mercado, ni con acciones ni con ningún otro instrumento financiero. Si quieres profundizar en el estudio de los indicadores de amplitud, tanto en nuestro libro como en nuestro foro encontrarás las herramientas necesarias para hacerlo. Si necesitas una primera aproximación, nuestra Guía Rápida del Sistema puede servirte como aproximación a lo que hacemos.

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5 comentarios en «Las «pequeñas» diferencias entre el Dax y el Ibex»

  1. En mi opinión la debilidad que exhibe últimamente el IBEX frente al DAX se da fundamentalmente a dos razones:
    – En primer lugar, una ampliación de la QE europea como sugirió nuestro amigo Mario afectaría muy negativamente a la banca europea en general, que ya no sabe de dónde sacar ingresos y por eso se está recurriendo a sucias estratagemas en forma de comisiones (muchas rozan la ilegalidad) hasta por abrir la puerta de una sucursal, empobreciendo mucho su imagen, lo cual parece no importarles mucho con tal de rascar unos euros de cada uno de nuestros mermados bolsillos por muy ruin que sea la jugada;
    – Por otro lado, el desafío secesionista catalán que ha explotado esta misma semana, que sea cual sea su desenlace traerá consecuencias nefastas para la gran mayoría de las cotizadas españolas.

    Todo esto creo que lleva ya bastantes días «descontándose», y es la causa segura de que el IBEX haya pasado de estar más de 200 puntos sobre el DAX hace 10 días a estar a más de 400 ahora mismo.

    Miguel, habría que decir también que de octubre de 2014 a abril de este año la revalorización del DAX fue una auténtica burrada de en torno al 50%, así que el hecho de que haya caído más que el IBEX desde entonces o que no haya recuperado tanto no creo que sea una buena forma de comparar la fortaleza de ambos índices, ya que como digo desde octubre’2014 el DAX gana por bastante.

    • Por una vez y sin que sirva de precedente, completamente de acuerdo contigo jejejejeej

  2. Miguel, el indicador bull bear , lleva un tiempo confuso, alternando colores y las ultimas barras mensuales naranjas. Intentó buscar patrones de otras fases años anteriores, no sé si es correcto….
    Saludos
    Luis

    • Bull Bear intenta decirnos si un valor está alcista o bajista así que no me extraña que esté liado…