¿Qué hacer cuando tu sistema de inversión dice una cosa y tu análisis otra?

No es la primera vez que ocurre ni será la última. ¿Qué hacer cuando tu sistema de inversión dice una cosa y tu análisis otra? Vamos a intentar aclararlo.

En la Bolsa no todo es blanco o negro. Es más, casi nada es blanco o negro. La gama de grises es realmente extensa y en la localización e interpretación de los matices está muchas veces la clave del éxito o del fracaso. Y es verdad, pero tampoco es una verdad universal. Hay momentos en los que los matices importan un bledo y lo único que importa es ganar o poner a salvo tu dinero.

Ahora mismo, es evidente, atravesamos por un periodo de matices importantes. La mayoría de los análisis, no sólo el de amplitud, coinciden en que el mercado debería tener una corrección reseñable para poder purgar algunos excesos, sanear el fondo de mercado y poder volver a las andadas alcistas. Pero el mercado no corrige y cuando lo hace lo hace de tal forma que los índices ni se enteran en la mayor parte de las ocasiones.

Ahí viene mi problema. Tengo sistemas de inversión referenciados a lo que hace el fondo de mercado, y resulta que me dicen que hay que seguir comprado. En cambio, mi análisis dice que el riesgo de un bajonazo es cada día mayor. El viernes dije que parecía que la suerte estaba echada y que a Wall Street le quedaba solo una última oportunidad. Y se aferró al clavo ardiendo. Oportunidad concedida, pero el fondo de la cuestión no ha cambiado. Mis sistemas siguen comprados y mi análisis me sigue recomendando ver los toros desde la barrera. ¿Qué hago?

Claramente, seguir los sistemas. Siempre hay que seguir los sistemas y sólo se puede alejar uno de los sistemas por estos motivos:

• El primero. Porque sucesos extraordinarios lo aconsejen. En mi caso, no he hecho caso de señales de los sistemas en ocasiones porque mis circunstancias personales no me aconsejaban entrar en el mercado. Aunque es algo mecánico eso de seguir un sistema, añade tensión, y con tu hija hospitalizada, por ejemplo, no hay tensión que deba ser añadida.
• El segundo. Porque haya circunstancias en el mercado no previstas en el sistema que muy claramente aconsejen no seguirlo.
• El tercero. Porque el sistema haya dejado de funcionar y deba ser puesto en ‘barbecho’. No todos los sistemas funcionan en todas las circunstancias. Es más, casi ninguno lo hace, y hay que aprender a interpretar cuando son más favorables las circunstancias para cada tipo de sistema. En mi caso, los sistemas que tengo en explotación son ‘siemprealcistas’ por lo que debe añadirse ‘a mano’ la excepción de que no operarán en tendencia bajista.

Todo lo que no sean estas tres excepciones es creerte más listo que el sistema y suele llevar a la ruina. Pensemos. Creé los sistemas porque soy un tipo listo que no se fía de la infalibilidad del análisis y sí de la esperanza estadística positiva. Para ponerlos en producción me tuvieron que demostrar que ganan pasta, que cuando pierden pierden poco y que sus ‘drawdown’ son soportables. Se basan en el concepto esencial que debe regir una operativa en Bolsa, sea del tipo que sea: la esperanza estadística positiva. ¿Quién soy yo para decidir que estoy por encima de un sistema que me hace ganar dinero? Pues eso, sistema, sistema y sistema.

Pero claro, ahora viene la pregunta clave, la que te puede hacer sabotearte a tí mismo. ¿No estaremos ante un supuesto excepcional no previsto por el sistema? Radicalmente no. Eso, desde que comencé a poner mis sistemas en explotación, éso sólo ha ocurrido una vez:

El 1 de agosto de 2015 anuncié públicamente que cerraba todas las posiciones abiertas por mis sistemas ante la posibilidad de una caída a plomo inminente. Todo está en el enlace. Había claramente una pauta terminal en uno de mis indicadores de mayor confianza a la hora de establecer si se está produciendo o no un cambio de tendencia y opté por no seguir comprado y por no atender temporalmente las señales que me pudieran dar los sistemas que entonces tenía en explotación, que eran el primero, el sistema de Market Timing automatizado por Joserain, y el último, basado en una pequeña variante del indicador I2CALM. PQT-2 aún no existía.

Desoí varias señales pero el análisis llevaba razón. No se trataba de una análisis de situación, sino de una alerta concreta y tipificada pero que es imposible de programar, al menos con mis limitados conocimientos de entonces (creo que ahora sí sabría programarla, pero no lo he hecho). Y finalmente, el mercado cayó a plomo.

Pero ahora no hay una situación semejante ni mucho menos. Nada que se parezca, así que sistema, sistema y sistema. Y si el mercado se empeña en hacerme ganar dinero a pesar de que no me llega la camisa al cuello porque el análisis me hace temer cosas que luego no pasan, pues seguiré ganando dinero. Que todos los problemas sean como ése.

Recuerdo que no hace demasiado tiempo publiqué una nota en el Foro avisando a mis foreros de que todo se había alineado para una entrada al alza, excepto la lógica. Obviamente, seguí la señal y, también obviamente, no me fue mal. ¿Por qué asumo más fácilmente que la lógica falla cuando se trata de una entrada larga tras una buena caída?

Creo que es por algo que Aitor Zárate me dijo una vez en los tiempos de formación con la idea de enfrentarme a la operativa intradiaria y que lo he guardado a sangre y fuego en mi memoria. «En el mercado hay que entrar cuando los tengas de corbata. Ése es el momento y no antes». Será por eso que mis sistemas entran en lugares un poco inverosímiles y asumo con facilidad ese riesgo porque considero que he sido capaz de encontrar herramientas suficientes como para minimizarlo.

En cambio, tengo que reconocer que no he encontrado soluciones para salidas certeras en todo lo alto (o cerca). He encontrado señales que me aconsejen ajustar stops, ponerlos en tal o cual sitio, pero no señales concretas de salida exitosas. Y, supongo, eso es lo que me lleva a que algo dentro de mí se pregunte constantemente en situaciones como estas si debe prevalecer el sistema o el análisis. Como me han vuelto a la cabeza esas dudas este fin de semana, pues las pongo en común con mis lectores, por si a alguno le sirve de algo lo que pienso y porque, en el fondo, el análisis de amplitud y mano fuerte sigue estando exactamente en la misma situación que el jueves.

Análisis de Amplitud y Mano Fuerte

Amplitud y Mano Fuerte en Wall Street

 

El Oscilador McClellan conjunto de Wall Street regresa por los pelos al terreno positivo mientras el calculado con los datos de volumen lo hace de forma un poco más holgada. Que fuera el viernes dia de vencimiento de futuros favorece que las alzas se noten más en el Oscilador McClellan de volumen, pero no puede quedarse en flor de un día así que habrá que seguirlo.

Por lo que se refiere a la mano fuerte, también el aumento de volumen que se produce en los vencimientos, y más en el del cuarto trimestre, hace que los datos estén un poco sesgados. El indicador incorpora toda clase de filtros, pero tendremos mejor visibilidad de lo que pasa hoy. De momento, lo que parece es que la mano fuerte sigue fuera en Wall Street, lo midamos por el método que lo midamos.

Adicionalmente, se mantiene la divergencia en la Línea de Avance y Descenso acumulada o Línea AD. ¿Ven cómo el análisis no concuerda con lo que hace el índice? Lo único que parece estar correcto con todo es que el Russell 2000 sí ha subido con fuerza, lo que está muy correlacionado con el buen movimiento que se vió el viernes en el fondo de mercado.

Amplitud y Mano Fuerte en las Bolsas europeas

En fin, pongo los gráficos de los mercados europeos porque ya es casi una costumbre, pero lo que nos cuentan es tan tremendo como lo que contaban el viernes. Llegan tarde a todas partes y hoy imitarán durante la mañaba lo que hizo Wall Street el viernes y si después de la apertura allí las cosas siguen bien, pues estupendo, y si no, se darán la vuelta sin más y se quedarán tan contentos. Tienen más peligro que un saco de bombas en manos del descerebrado norcoreano.

Movimientos sectoriales de la Mano Fuerte

Quien esperara una reacción de la mano fuerte con el vencimiento de futuros en Europa puede seguir esperando porque lo cierto es que el viernes las cosas no fueron mucho mejor que en el resto de la semana. Habrá que estar atentos a la reacción de hoy porque los datos de volumen del viernes están sesgados porque la contratación se dispara cuando se aproxima la cuádruple hora bruja.

Eso sí, a pesar de que no era el mejor día para cualquier cálculo respecto a la mano fuerte, queda claro que el roto que los resultados de H&M ha hecho al sector de Comercio/Retail es de consideración. Es uno de los principales valores del sector y rápidamente ha contagiado a otro valor en horas bajas, Inditex, con lo que el cómputo general de mano fuerte, que es lo que medimos con el saldo, es claramente vendedor. Son dos valores que pesan mucho.

En cambio, cuando buscamos en el rastro de la mano fuerte valor a valor, obtenemos que no todo es tan malo en este sector. Los valores dependientes del textil se están viendo afectados claramente por la tardía llegada del frío a Europa, pero hay un buen puñado de valores que mantienen a la mano fuerte dentro. No pesan tanto como algunos gigantes, pero hay que dejar constancia de que no todo es igual en el sector.

Por lo demás, destaca que por fin los que mandan en el mercado se han puesto de acuerdo en qué sectores les gustan más. Y resulta que a mí, particularmente, me gustan poco porque son sectores incapaces de tirar del mercado con cierto brío y constancia. Recursos Básicos, Real Estate, Medios de Comunicación y Viajes y Ocio son los favoritos de la mano fuerte.

Por abajo, destacar que Automóviles y Recambios va subiendo poco a poco en la tabla de rastro, que Cuidados de la Salud no empeora, que ya es bastante, y que aunque Utilities también parece mejorar sus prestaciones ligeramente, sigue sepultada en los últimos lugares de ambas tablas.

Habrá que esperar a los datos de hoy, lunes, para ver realmente si hay movimiento y respaldo de la mano fuerte a nuevas alzas o vamos a seguir en este lateral eterno del que no salimos en Europa.

Comenté el viernes que daba la sensación de que el dinero inteligente podía haber dado por concluido el año y el escaso movimiento de las tablas en el día del vencimiento de futuros invita a seguir pensando lo mismo. Ya veremos si los datos del lunes, menos condicionados por el aumento de volumen típico del día del vencimiento, nos dicen otra cosa.

Lo más destacable es que la mano fuerte sigue prefiriendo sectores con escaso tirón, como Recursos Básicos, o con más tirón e importancia, como Bienes de Consumo, pero que suele estar siempre en segundo plano. Adicionalmente, Energía es la mejor por saldo del dinero inteligente, pero en la tabla de rastro está más abajo e incluso en configuración bajista. Dado que los saldos positivos son tan menguados, el peso del dato de la tabla de rastro aumenta, así que cuidado.

Lo que también llama la atención es la situación de Real Estate y Medios de Comunicación. Parece que concuerda con lo que nos dicen las tablas europeas, pero en la tabla de saldo americaba son de los peores a pesar de la mejora del viernes.

Los que no mejoran son los Bancos, que parecen no necesitar en absoluto el concurso comprador de la mano fuerte, que se puede permitir el lujo incluso de ir reduciendo su siempre importante saldo en estos valores. Muy típico de fin de año, pero es que el fin de año en este sector comenzó a finales de octubre…

Y en nuestro seguimiento a Utilities, cada vez parece más claro que no hay posicionamiento en el sector, que el dinero inteligente no busca el refugio en él. Lo que es más difícil es discernir si no lo hace porque prefiere otros sectores o porque apuesta por la liquidez.

¡¡Buen trading!!

NOTA DEL AUTOR: Nada de lo contenido en el presente artículo debe ser tomado como una invitación a la toma de posiciones en mercado alguno. Se trata de mi análisis sobre la situación de las Bolsas, compartido por puro placer y resultado de años de trabajo e investigación. Si quieres profundizar en alguno de los conceptos utilizados, puedes hacerlo con nuestro libro o en nuestro Foro.