Si algo le gusta al mercado es llevarme la contraria

No es casualidad ni me estoy volviendo paranoico. Si algo le gusta al mercado es llevarme la contraria. En el mercado hay unos tíos muy poderosos que se dedican a leer mi blog y actúan a lo bestia solo para conseguir que no se cumpla lo que vaticino, de tal forma que si aviso de que hay peligro de corrección, es un momento estupendo para apalancarte en largos a lo bestia porque no va a bajar ni por casualidad.

Es sistemático. Sólo me hacen caso a partir de la tercera advertencia, así que abrir apuestas de muy corto plazo haciendo lo contrario de lo que pienso puede ser una estupenda forma de operar. Puede que lo ponga en marcha de inmediato. Ser contrarian de mí mismo, ¡¡qué ilusión!!

Bueno, tendré que suspender el experimento porque esta es la tercera advertencia. Las cosas están cogidas con alfileres y como venga el lobo y meta un s0plido se van a caer todos los palos del sombrajo y vamos a tener que salir corriendo en busca de la casa del siguiente cerdito para refugiarnos.

Y es que la sesión de ayer nos dejó de nuevo regusto a anticipación de una buena caída. Lograron mantener los índices principales en pérdidas muy, pero que muy moderadas y el que más el que menos se quedará tan contento. Pero en el mercado bajaron más de 1.500 valores más de los que subieron, lo que no concuerda demasiado con bajadas tan controladas, sobre todo porque no es la primera vez en los últimos días en que sucede esto:

Lo peor es que en los episodios anteriores, al menos teníamos bajadas, con velas negras incluso durante un par de días y todo, en tanto que la de ayer queda en todo lo alto, con vela blanca y una bajada literalmente infinitesimal respecto al día anterior. ¿Qué provoca esto?

Pues que resulta que el Oscilador McClellan ya ha tocado la zona negativa y en lugar de salir disparado de ahí para despejar dudas, respeta exquisitamente la directriz bajista trazada sobre él. Y todo esto mientras la actividad de la mano fuerte va difuminándose poco a poco:

Entró a saco para sacar al mercado de la zona de mínimos pero ya no empuja ni por casualidad con la misma fuerza. El problema es que esa fuerza debiera ser miuy necesaria para abordar el asalto a la zona de máximos. Sin un empuje decidido por parte de la mano fuerte, los máximos serán una aspiración inalcanzable, pero parece que la mano fuerte esté ahora mismo menos interesada en apoyar el movimiento.

Lo dicho, son avisos de que puede llegar la corrección en cualquier momento e incluso que ésta puede tener cierto empaque. ¿Abro largos esta misma tarde?  Es coña, pero ganas sí que quedan.

¡¡Buen trading!!

NOTA DEL AUTOR. Todo lo expuesto en este artículo es fruto de mi análisis, que es el resultado de años de formación y trabajo. Si te ha gustado, me haces un gran favor si lo compartes en las redes sociales. Mis análisis los publico exclusivamente con fines didácticos y no representan en absoluto una invitación a realizar operación alguna en el mercado, ni con acciones ni con ningún otro instrumento financiero. Si quieres profundizar en el estudio de los indicadores de amplitud, tanto en nuestro libro como en nuestro foro encontrarás las herramientas necesarias para hacerlo. Si necesitas una primera aproximación, nuestra Guía Rápida del Sistema puede servirte como aproximación a lo que hacemos.